sábado, 25 de noviembre de 2017

Visperas

Andrés Manuel López Obrador acaba de anunciar que se registrará como precandidato a la Presidencia el próximo 12 de diciembre (justo el día de la Virgen Morena, para mantener el aura religiosa de su propuesta iluminada) y todo indica –al menos el rumor es muy fuerte al respecto– que podríamos estar a horas de conocer al precandidato del PRI (cuando “las fuerzas vivas del partido” –es decir el presidente Peña Nieto– decidan al fin quién es el bueno).
  Lo del precandidato del Frente Ciudadano parece que tardará un poco más, debido al estira y afloja que se está dando al interior de esa organización y que podría derivar en dos posibilidades: que finalmente Ricardo Anaya y Alejandra Barrales se salgan con la suya y el primero quede como precandidato presidencial, mientras la segunda vaya por la gubernatura de la Ciudad de México, o que se produzca un rompimiento por el descontento de gente como Miguel Ángel Mancera y Rafael Moreno Valle y al final el PAN, el PRD y Movimiento Ciudadano opten por lanzar cada uno a su propio precandidato. Todo puede suceder y muy pronto lo sabremos.
  El caso es que nos encontramos en vísperas de un cambio total de la actualidad política mexicana de cara al 2018 y que las diferentes fuerzas se acomodarán de muy diversas maneras, lo cual, para los estudiosos, los analistas o los meros observadores será un asunto la mar de interesante.
  A partir del momento en que las precandidaturas se definan y haya tres o cuatro o cinco o incluso más competidores (no olvidemos a los posibles independientes), los efectos se empezarán a ver reflejados en las encuestas y probablemente estas serán muy distintas a las actuales.
  ¿Se mantendrá AMLO a la cabeza como hasta ahora? ¿Lo empezarán a emparejar quienes ya tendrán identidad, nombre y apellidos reconocibles? ¿Qué tan dura estará la guerra sucia a partir de esos momentos y cómo influirá en las preferencias?
  Vísperas de contienda, vísperas de disputa, vísperas de guerra. Todos irán con todo y contra todos. Nos esperan seis meses de lucha sorda. ¡Que se abra el telón!

(Publicado este sábado en mi columna "Cámara húngara" de Milenio Diario)

No hay comentarios.: