jueves, 26 de noviembre de 2009

Algunas consideraciones acerca de Twitter


El fenómeno de Twitter ha rebasado al del resto de las redes sociales por internet, incluidas algunas tan populares como facebook o MySpace. No sé si se deba a su inmediatez o a lo conciso y rápido de sus mensajes, pero la manera como ha comenzado a influir en la vida cotidiana de millones de personas resulta impresionante. Aunque conozco a gente muy metida en la red que se niega a incorporarse a Twitter, creo que la mayoría terminará por hacerlo.
Yo manejo dos cuentas tuiteras: @hualgami (personal) y @lamoscaenlared (de la revista en línea) y entró diariamente para hacer comentarios y dar informaciones y también para ver lo que amigas, amigos, personalidades públicas y gente que no conozco escribe. Existe ya una especie de sociedad tuitera y hasta un top five por el que se pelean rabiosa y un tanto absurdamente personas que supondríamos sensatas.
Hay quienes han hecho de Twitter su propio sitio de popularidad (amigos y conocidos como Jairo Calixto Albarrán o Fedro Carlos Guillén cuentan con una enorme cantidad de seguidores, lo mismo que personajes del periodismo y la política como Federico Arreola, Gerardo Fernández Noroña, Roy Campos y hasta Juanito). No sé si les sirva para algo más que para mejorar su autoestima, pero hay algunos como Arreola a quienes veo obsesionadísimos con estar todo el tiempo en el primer lugar de ese top five.
Ya de una manera más amplia y generalizada, Twitter empieza a influir cada vez más en un importante sector de la opinión pública, en temas como el problema de Luz y Fuerza, la despenalización del aborto, el caso Iztapalapa, etcétera. Sin duda será un factor de influencia en el próximo proceso electoral y en las propias elecciones. Va a ser muy interesante observar el fenómeno, pero también estar adentro del mismo. Twitter llegó para quedarse..., al menos hasta que otra novedosa y muy imaginativa red social llegue para reemplazarlo.

1 comentario:

Unknown dijo...

Uuuta, yo trabajo en esto de la computación y ni sé qué pedo... me da pavor. es evidente que día con día va a llegar el momento en que la ficción supere la realidad. soy fan de la tecnología, pero, cuánto falta para que ésta empiece a ser una preocupación. ya veo a los güeyes que digan: chingada madre, estábamos mejor sin el internet.