sábado, 17 de mayo de 2008

La huguiña de Felipe*


Cuando Hugo Sánchez vivía sus peores momentos al frente de la selección mexicana de fut, solía culpar a la prensa de las derrotas del equipo tricolor (algo que también hacía su antecesor y archirrival, Ricardo Antonio La Volpe). Pues bien, Hugo ya está haciendo escuela en la polaca nacional y su alumno más destacado ha resultado ser el mismísimo presidente Felipe Calderón Hinojosa.
Frente al terrible costo que ha tenido la llamada guerra contra el crimen organizado (que básicamente es una guerra contra el narco), nuestro preciso parece desesperado y exasperado, de ahí expresiones tan poco felices como la del pasado lunes 12 de mayo, cuando gritó a los cuatro vientos (manotazo incluido) que los medios de comunicación deben divulgar las acciones contra los narcotraficantes, en lugar de “compartir con los criminales la estrategia de sembrar el terror”. Desafortunada frase del primer mandatario de la Nación.
Aunque nadie puede negar la gravedad del asunto, sigo pensando que fue un error arrancar el sexenio con el lanzamiento de esa guerra antinarco, misma que parece llevar a México a un callejón sin salida. Temas como la educación y la pobreza merecían, merecen, una combatividad y un derrame de recursos igual o más intensos.
Hace un año casi exacto, el 19 de mayo de 2007, escribí en este mismo espacio que “la guerra declarada por el gobierno de Felipe Calderón contra los señores de la droga amenaza con transformarse en un narcoapocalipsis y no sé si eso es exactamente lo que más le conviene al país”. No quiero presumir de agorero, pero creo que eso es exactamente lo que ha pasado a lo largo de estos doce meses.
Culpar a la prensa de complicidad por lo cabronas que están las cosas es a todas luces un despropósito, lo digan Felipe Calderón, Hugo Sánchez o Verónica Castro. No se puede, no se debe, exigir un apoyo incondicional y acrítico frente a los problemas generados por una mala estrategia. La bronca es que no son lo mismo la farándula o el futbol que las decisiones de Estado.

*Publicado hoy en mi columna ¨Cámara húngara¨ de Milenio Diario

1 comentario:

Beto dijo...

uhmmm yo siempre he pensado que la politica no es mas que un show, es una posicion comoda la mia, pero es la unica explicacion que le encuentro a tantas pendejadas consecutivas